By Susana Farran | Educación, Empresas, España, Futuro, Herramientas, Talento, Trabajo, Transformar | 1 Comments
Dijo Isaac Newton: “Si he logrado ver más lejos es porque he sido capaz de subirme en hombros de gigantes”. Esta humilde frase es un sincero reconocimiento a todos aquellos que en su día le precedieron y gracias a quienes, Newton pudo llegar a ser el científico que fue.
Todos necesitamos de otros donde apoyarnos para ser capaces de ver más lejos. Esa es la esencia del mentoring, una práctica que implica un compromiso entre dos o más personas, donde se intercambian experiencias, vivencias y visiones con un propósito de partida: ayudar a desarrollarse a quienes tienen menos experiencia, a tomar mejores decisiones, a no cometer errores. La magia del mentoring está en que no solo el mentorizado sale beneficiado de la relación, también los mentores.
Entrevistamos a Julio Rodríguez Díaz. Empresario, escritor y conferenciante. Director de la Red de mentoring de España y Manager del IESE ALUMNI Mentoring Program. @juliorodriguezd @redmentoring.
Nuestros padres son y han sido la mayoría de las veces los primeros y principales mentores en nuestra vida. Lo que sucede es que, en las etapas más conflictivas de nuestro desarrollo, que suele ser en la adolescencia, muchas veces no los reconocemos como tales, buscamos otros referentes fuera de nuestro ámbito familiar. Con el paso de los años nos damos cuenta de que su forma de comportarse, sus valores, sus consejos han calado profundamente en nuestra forma de ser y en nuestro desarrollo. Mis tíos fueron mis primeros mentores, ellos cumplieron ese papel. Tuve la suerte de tener dos personas en mi etapa adolescente, que cuando me decían las cosas, las recibía más que como ordenes como sugerencias, y eso hizo que estuviese mucho más receptivo con ellos que con mis padres.
Cualquier momento es bueno para apoyarte en un mentor. En la actualidad la práctica del mentoring ha dejado de ser una práctica aislada entre dos personas para convertirse en un campo de relaciones donde la gente interactúa entre sí, se trata de crear redes de aprendizaje y apoyo mutuo. Incluso el lenguaje que se utiliza cuando se establecen relaciones de mentoring está evolucionando, ahora se habla de consejeros y de aprendices, donde cualquiera de nosotros puede cumplir ambos roles, cualquiera puede ser un posible consejero y aprendiz al mismo tiempo, todos tenemos necesidades a la vez que competencias que compartir. Un buen mentorizado ve el mentoring como algo más que una jerarquía de arriba abajo donde una persona joven busca a otra mayor que él y con más experiencia. Se trata de un camino de doble vía donde ambos se apoyan y ambos aprenden, y no de un camino de un solo sentido donde siempre es el mentor el que brinda tiempo, experiencia, energía y conexiones.
Cualquiera de nosotros tiene experiencias, conocimientos y habilidades que pueden ser útiles para otros, sin embargo, el mentor aparece cuando alguien tiene una necesidad y otra persona le puede y desea aportarle valor. De nada sirve tener vivencias si nadie tiene necesidad de ellas para su propio desarrollo. Por eso es tan importante la existencia de una red que te apoye en la búsqueda de los mejores cruces. Además de esto es necesario que el mentor tenga unas competencias claves desarrolladas para poder desempeñar con éxito su role. En la Red de mentoring de España, las tenemos muy estudiadas y tenemos programas de formación y certificación para su desarrollo. Ocho son las competencias que debe tener un buen mentor y son: tener un marcado locus de control interno, poseer habilidades de comunicación y la capacidad para contar historias, la escucha activa, el manejo adecuado de la retroalimentación o feedback, una comunicación apreciativa, el saber formular preguntas poderosas y ser un buen consejero son claves para el desempeño adecuado de este role.
Por supuesto que sí. Depende cual sea el propósito que persigue el mentorizado. El obtener nuevas ideas, perspectivas, opiniones de otros ámbitos diferentes al propio puede ser un aire fresco que permita innovar y encontrar soluciones creativas para situaciones cotidianas. Hay muchas temáticas que son transversales, hay objetivos de desarrollo personal que no necesariamente se suscriben a un único sector. Tanto si hablamos de habilidades personales, de conocimientos específicos u objetivos de crecimiento personal el tener acceso a profesionales de otros ámbitos, culturas, sectores, áreas funcionales, diferentes edades, pueden enriquecer mucho nuestra capacidad de encontrar soluciones y a la vez puede ser muy inspirador.
Muchas veces me hacen la pregunta que diferencias hay entre el mentoring y el coaching. A mi juicio la pregunta está mal formulada, por ejemplo, es lo mismo que preguntar que diferencia hay entre el liderazgo y la buena comunicación, se supone que un buen líder ha de ser un buen comunicador. Así que más que hablar de diferencias tendríamos que hablar de herramientas que pueden ser complementarias, encaminadas a ayudar y sacar lo mejor de uno mismo.
El coaching se fundamenta en el arte de hacer buenas preguntas, un coach pregunta y escucha, no puede opinar ni dar su punto de vista. Es la mayéutica de Sócrates, la técnica de hacer aflorar las respuestas que permanecen latentes dentro de otros.
Claro que el mentor ha de saber hacer buenas preguntas, esto clave para poder entender la situación del mentorizado y poder aportar así ideas y compartir sus propias experiencias. Pero el mentor no se puede quedar solo ahí, un mentor ha de dar su punto de vista, es un consejero que aporta distintas perspectivas al mentorizado para que tome mejores decisiones. Un mentor es un conector que facilita contactos que ayuden a acelerar el proceso de aprendizaje, es un modelo de comportamiento también. En definitiva, el mentor “se moja” con su propia opinión con el propósito de aportar nuevas opciones al mentorizado y que este llegue a tomar mejores decisiones por si mismo. La pregunta es una herramienta más que ha de utilizar el mentor con mucha destreza.
Hoy en día el mentoring está considerado como una de las palancas de motivación y aprendizaje más eficaz para el impulso de las personas en las organizaciones. Los programas de mentoring son una de las mejores herramientas para lograr estos objetivos. Muchas organizaciones e instituciones han descubierto que implantar programas de mentoring, dirigido a colectivos específicos, contribuye a potenciar el desarrollo de sus iniciativas, a retener el talento y a mejorar sus resultados. Hoy el mentoring ha tomado más protagonismo que nunca en las empresas, en el mundo académico y en el entorno emprendedor.
Está demostrado que la productividad gerencial se incrementa hasta en un 88% cuando el mentoring entra en acción frente a un 24% cuando solo hablamos de formación tradicional. Estudios realizados por la Red de mentoring de España sobre el desarrollo de personas nos ha demostrado también que los mentorizados pueden mejorar hasta once competencias esenciales de una forma mucho más eficaz que con los métodos tradicionales. En esos mismos estudios hemos concluido que el 35% de trabajadores con más talento que no recibían mentoring buscaban un nuevo trabajo o se desmotivaban en un plazo no superior a 24 meses. El mentoring beneficia a las organizaciones porque:
La Red de mentoring de España es la red de referencia en España y Latinoamérica, desde 2009 desarrollamos formación para mentores y programas de mentoring en las organizaciones, para emprendedores y académicos. Nuestro programa de certificación de mentoring está avalado por importantes empresas e instituciones donde se ha desarrollado y está en funcionamiento. El equipo de mentores acreditados para la formación está conformado por reconocidos profesionales. Los alumnos que se integran a la certificación obtienen las mejores herramientas para el desarrollo de su labor de mentores. Hemos gestionado más de doscientos programas de mentoring estos últimos 10 años, con más de 4.000 mentores que han participado en nuestras iniciativas, más 750 mentores certificados, tenemos actividad en los principales países de Latinoamérica con instituciones locales y universidades de prestigio asociadas. En la actualidad colaboramos también con la Fundación Transforma España en su programa de mentoring aportando metodología y herramientas al proceso.
El mentoring para concluir acelera poderosamente nuestro proceso de aprendizaje y para ello es necesario empezar por regalar a otros lo que uno sabe y a cambio obtener de los demás lo que a cada uno le falta. De esta manera la práctica del mentoring hoy en día, en su esencia se ha convertido en compartir aquello de nosotros que es valioso para otros en círculos abiertos. Por ello desde La red de Mentoring España nos aliamos con la Fundación Transforma España para poder ofrecer el mejor proceso de mentoring como herramienta de su Programa Multicompañía de desarrollo de talento y que siga siendo todo un éxito.
Se trata como decía Newton de buscar nuestros propios gigantes y de ofrecer nuestros hombros, para que otros puedan también llegar a ver mucho más lejos. ¿Te sumas a este reto?
Las experiencias traumaticas y los comentarios negativos crean patrones mentales toxicos que nos condicionan mucho mas de lo que creemos. Nuestros cerebros fueron cableados durante epocas mas salvajes y su respuesta fight or flight —lucha o huye— a las amenazas modernas ha quedado desfasada. Dicha respuesta perpetua en nuestra mente momentos en los que somos victimas de las circunstancias, fallamos el penalti decisivo o ni siquiera nos atrevemos a tirarlo. Decia Henry Ford que “los obstaculos son esas cosas espantosas que ves cuando apartas los ojos de tu meta”. Para crecer personalmente necesitas fijarte una meta, disenar la mejor estrategia para alcanzarla y concentrarte en ella. Este es el paso previo a cualquier accion y en el que se debe invertir todo el tiempo que sea necesario.